La Catedral de Durham es uno de los monumentos más impresionantes e icónicos de la ciudad de Durham, ubicada en el noreste de Inglaterra. Construida en el siglo XI, esta catedral es un ejemplo excepcional de la arquitectura normanda y gótica, y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Historia
La historia de la Catedral de Durham se remonta al año 1093, cuando fue fundada por el rey Guillermo el Conquistador. La construcción de la catedral tomó más de 40 años y fue dirigida por el obispo William de St. Calais. Desde entonces, la catedral ha sido un lugar sagrado de peregrinación y adoración, además de ser un importante centro cultural y educativo.
Durante la Edad Media, la catedral fue un importante centro de aprendizaje y atrajo a estudiantes y académicos de toda Europa. También fue un lugar de descanso para los peregrinos que viajaban a la tumba de San Cuthbert, uno de los santos más venerados de Inglaterra.
Arquitectura
La Catedral de Durham es famosa por su impresionante arquitectura, que combina elementos normandos y góticos. La nave principal, con sus bóvedas de cañón y arcos apuntados, es un ejemplo destacado del estilo románico normando. Sin embargo, el transepto y el coro son ejemplos excepcionales de la arquitectura gótica, con sus altas y elegantes ventanas y sus intrincados detalles.
Otra característica notable de la catedral es su torre central, que se eleva a 66 metros de altura y es una de las más altas de Europa. Esta torre es conocida como la “Aguja del Norte” y es un símbolo distintivo de la catedral y de la ciudad de Durham.
Qué ver en la Catedral de Durham
La Catedral de Durham alberga una gran cantidad de tesoros y artefactos históricos, incluyendo el famoso Libro de los Evangelios de Lindisfarne, una obra maestra del arte medieval. También es posible ver la tumba de San Cuthbert, un santuario que ha sido un lugar de peregrinación durante más de 1000 años.
Otro punto destacado de la catedral es el claustro, un hermoso patio interior rodeado de galerías cubiertas. El claustro es un lugar tranquilo y sereno que contrasta con la magnificencia de la catedral y es un lugar ideal para tomar fotografías.
Consejos para visitar la Catedral de Durham
- Compra tus entradas con anticipación para evitar largas filas.
- Lleva ropa cómoda y calzado adecuado, ya que puede haber escalones y caminos irregulares en la catedral.
- No olvides respetar las normas de vestimenta y comportamiento en un lugar sagrado.
- Considera tomar un tour guiado para obtener más información sobre la historia y la arquitectura de la catedral.
Horarios y precios
La Catedral de Durham está abierta todos los días, excepto los domingos por la mañana debido a los servicios religiosos. Los horarios varían según la temporada, por lo que se recomienda consultar el sitio web oficial para obtener información actualizada.
El precio de la entrada es de £8 para adultos y £5 para estudiantes y personas mayores. Los niños menores de 5 años pueden entrar de forma gratuita.
En resumen
La Catedral de Durham es un lugar imprescindible para visitar en la ciudad de Durham. Con su impresionante arquitectura, su historia fascinante y sus tesoros únicos, esta catedral es un lugar que no te puedes perder si estás en la zona. Además, su ubicación en lo alto de una colina ofrece vistas impresionantes de la ciudad y del río Wear.
No pierdas la oportunidad de visitar este monumento histórico y sumergirte en su atmósfera sagrada y mística. La Catedral de Durham es un verdadero tesoro de la arquitectura y la historia de Inglaterra, y sin duda te dejará impresionado.